Me he leído el cuento de Edgar Allan Poe La Carta Robada. Este cuento no da tanto miedo como otros que hemos leído, ya que es un cuento de intriga. En este caso se trata de encontrar una carta robada; la policía registra una casa de arriba a abajo, incluso con un microscopio, pero no encuentran la carta robada. El protagonista de la historia, Dupin, nos enseña que no solo hay que saber qué buscar, sino observar la astucia del que la ha robado, para saber dónde la ha escondido. Empieza con razonamientos lógicos para averiguar el escondite y averigua el modo de razonar del ladrón.
Auguste Dupin es el nombre del detective del relato, y este personaje aparece en alguna novela posterior e influyó en el de Sherlock Holmes (en Estudio en escarlata, la primera aparición del célebre Holmes) y en Los crímenes de la calle Morgue, de la cual también se realizó una versión cinematográfica.
A mí me recuerda a una serie llamada Mentes criminales en la que se fijan más en la forma de actuar y pensar del criminal que en las pruebas físicas.
Me ha gustado, ha sido muy interesante y muchas veces no nos damos cuenta de lo que tenemos delante de nuestras narices. Una vez le quite 5 euros a mi hermano, los dejé encima de la mesa de mi habitación, estaban a la vista, y él se pegó una hora entera buscándolos. ¡Cómo están las cabezas Manolo!
Juan Fernández, 3º ESO A
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