viernes, 17 de mayo de 2013

Cartas de Galdós

Recién empezado el tema de literatura (Realismo y Naturalismo) y aprovechando una de las muchas anécdotas con las que se entretiene nuestro profesor de lengua, he investigado un poco acerca de las cartas que se enviaron a mediados del siglo XIX el escritor Benito Pérez Galdós y Emilia Pardo Bazán. Se han encontrado aproximadamente unas 90 cartas enviadas mutuamente con un contenido un tanto “picantón” para la época ya que se ha sabido que ambos novelistas tuvieron una relación amorosa. Incluso se ha escrito un libro llamado Miquiño mío, Cartas a Galdós, recopilando todas las cartas de la pareja, del cual se encargaron Isabel Parreño y Juan Manuel Hernández. 

Emilia Pardo Bazán fue una novelista, periodista, ensayista y crítica española introductora del naturalismo en España, nacida en la Coruña el 16 de septiembre de 1851 y que murió en Madrid el 12 de mayo de 1921.  
   Benito María de los Dolores Pérez Galdós (Las Palmas de Gran Canaria, 10 de mayo de 1843 - Madrid, España, 4 de enero de 1920), conocido como Benito Pérez Galdós, fue un novelista, dramaturgo y cronista español. Se trata del mayor representante de la novela realista del siglo XIX en España, y uno de los más importantes escritores en lengua española. 

Os dejo aquí algunas de las cartas que se enviaron para que las podáis judgar vosotros mismos:

«Te muerdo un carrillito y te doy muchos besos por ahí, en la frente, en el pelo y en la boca»,


«Miquiño, mi bien: me están volviendo tarumba tus cartitas. Creo que jamás escribiste con tanta sencillez, con una gracia más bonita y más tierna. No sé las veces que he leído esta última epístola, ni el bien que me hizo, ni cuánto se me humedecieron los ojos... Un beso del fondo del alma»,


«Triste, muy triste... como diría un orador de la mayoría, me quedé al separarme de ti, amado compañero, dulce vidiña. Soy de tal condición que me adhiero y me incrusto en el alma de los que me manifiestan cariño, y el trato va apretando de tal manera los nuditos del querer, que cuando menos lo pienso me encuentro con que estoy atada y no me puedo soltar»


«Mi bien, mono, compañerito, que te acuerdes mucho, mucho, de mí, y con las mismas saudades que yo de ti; que sueñes en renovar horas tan venturosas, y que vayas tramando el modo de realizarlo en compañía de tu Peinetita, que te besa un millón de veces el pelo, los ojos, la boca y el pescuezo»


«No hemos hecho más que arrimar la manzana a los dientes, esta es la verdad, no hemos agotado, ni siquiera bebido a boca llena el dulce licorcito que nos podemos escanciar el uno al otro»


¡Esa última la mejor sin lugar a dudas! 

Paola Fogued, 1º de bachillerato

1 comentario:

  1. Encantado de que os guste el libro. En estas cartas se ve cómo los escritores son personas que se enamoran y entristecen, que usan la literatura y la palabra para expresar el amor y la amistad como cualquiera de nosotros.

    Saludos desde Sevilla y enhorabuena por el blog y por los artículos.

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