Terminando, que es gerundio

Estamos anegados de documentación, borradores, nuevas normas, confusión, palimpsestos educativos en forma de órdenes y normas, todos ellos llenos de innumerables errores, anacolutos, faltas de ortografía y esa prosa farragosa, deliberadamente confusa y ambigua, que caracteriza a los textos y leyes educativas. Cualquier día de estos subiremos los grandes éxitos ortográficos que abrotoñan en el disparate que se está convirtiendo el final de curso, su baile de siglas, programas e incongruencias, pero hasta entonces nos conformamos con el fondo de armario de nuestros chicos, que resulta mucho más provechoso y agradable:

Doble falta: un pronombre sin tilde y un monosílabo que no debe llevarla. En la foto, el ínclito jugador celebrando su ausencia en la convocatoria.

Otro colega del anterior, que parece haber redactado el titular, y al que habría que explicarle algo sobre el uso del determinante ante las palabras que empiezan por "a". Bueno, habría que intentar explicarle eso y más cosas, pese a lo contumaz que pudiera resultar.

 Tildes en mayúsculas y una curiosa forma de escribir el adverbio "además".

 "Comienzando, que es gerundio"

El odioso empleo de la arroba para referirse al masculino y femenino...

Y la tilde se coló en el determinante...