Nuestro enigma del otro día que hablaba de una versión de La Odisea en Texas fue resuelto con rapidez y diligencia por una de las alumnas de 1º de ESO B, Clara, quien descubrió que la imagen pertenecía a John Wayne y correspondía con el célebre final de la película Centauros del desierto. Esta es su entrada:
La escena pertenece a una de las más renombradas películas con John Wayne como protagonista: Centauros del desierto (The Searchers), dirigida por John Ford. Del año 1956, la película (clásico del oeste) nos recuerda en cierta manera a La Odisea (con la diferencia de que esta se ambienta en el Mediterráneo y no en los EEUU), una también muy conocida obra perteneciente a los inicios de la literatura, muy recomendable y que estamos leyendo en clase. Vamos a ver el porqué de esta alusión a dicho libro (un poema en sus orígenes).
Su argumento es el siguiente: Ethan (John Wayne) regresa a su casa después de haber estado en la guerra y al poco tiempo toda su familia es asesinada por los comanches y su sobrina raptada. Jura rescatar a su sobrina y matar a todos los indios que hayan intervenido en estos actos criminales. Durante cinco largos años persigue a los comanches, acompañado de su sobrino Martin (Jeffrey Hunter).
De ahí podemos apreciar un cierto parecido argumental con la historia narrada en La Odisea. En primer lugar, Ulises (u Odiseo) también vuelve con su familia después de haber luchado en la guerra de Troya y a su regreso se encuentra con que su esposa (sobrina en el caso de Ethan) se va a casar y ha organizado una ceremonia para ver quién es digno de conquistar su corazón (raptarla). Ulises, con ayuda de Telémaco (Martin), asesina finalmente a todos los pretendientes (los comanches). En resumen, esta gran película nos hace recordar a una también gran obra de la antigüedad: La Odisea de Homero, pero con algunas diferencias, como el lugar y la época en la que acontecen los hechos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario